Temporada OSCyL 15 2017-2018 Turno 2

Conciertos de abono

- Sala Sinfónica
12 / 17 / 22 / 27 / 32 / 35 € • Fila OSCyL 50 € / Abonados OSCyL 40 €

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Orquesta Sinfónica de Castilla y León
Andrew Gourlay, director

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Homenaje al abonado

Piotr Ilich Chaikovski (1840-1893):
Romeo y Julieta (obertura-fantasía)

Piotr Ilich Chaikovski:
Concierto para violín en re mayor, op. 35:
Movimiento I. Allegro moderato

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Dmitri Shostakóvich (1906-1975):
Sinfonía n.º 11 en sol menor, op. 103, “El año 1905”


La gran acogida que en otras ocasiones ha tenido la programación de un concierto Homenaje al abonado –una propuesta única en España– ha hecho que esta temporada se continúe con un evento tan singular, que ya parece haberse asentado como una especie de tradición con la que el público disfruta muy claramente.

La iniciativa partió del director emérito de la Orquesta Sinfónica de Castilla y León, Jesús López Cobos, que se puso en práctica con gran éxito durante la etapa en la que fue titular de la Orquesta Sinfónica de Cincinnati.

En esta ocasión, algunos profesores de la orquesta propondrán un número de obras entre las que el director Andrew Gourlay escogerá una lista para que el abonado elija sus favoritas. En la primera parte figurarán dos piezas sinfónicas, una de ellas con solista; y, en la segunda, una gran obra.

Esta vez tanto orquesta, director y público, que son los tres principales protagonistas de cada concierto, colaborarán estrechamente en la configuración de una velada muy especial. Así, el programa que se presentará partirá de una interacción a tres bandas, en la que se combinarán los gustos de todos. Se trata de un enfoque dúctil y provechoso que hace crecer a la OSCyL, ya que en esta ocasión los distintos agentes imprescindibles en los conciertos se relacionan de una manera muy particular y fructífera.

Con esta iniciativa, la OSCyL y Andrew Gourlay intentan devolver en cierta medida todo ese cariño que los abonados, con su fidelidad temporada tras temporada, transmiten a una orquesta con la que se identifican y a la que aprecian. Se intenta así que el público no solo disfrute de la programación sinfónica que cuidadosamente se elabora cada año, sino que se sienta parte del proyecto común de una de las instituciones culturales de referencia en la comunidad.